Elementos de tortura en la Edad Media
marionavila | 15 abril 2015La Edad Media fue uno de los períodos más oscuros en la historia de la humanidad caracterizado por la violencia, la irracionalidad y el deterioro. El Hombre creía que su breve existencia debía ser dedicada a Dios y especialmente a la institución de la iglesia, lo cual significó enormes desigualdades, sangrientas conquistas y todo lo que ya bien sabemos. Por este motivo se desarrollaron diferentes maneras de torturar a la gente para descubrir la verdad. Estas fueron algunas de las más violentas y dolorosas:
El toro de Falaris fue uno de los dispositivos de tortura más populares. El aterrador constaba en un enorme toro de bronce puro, dentro del cual cabía una persona. El toro tenía una entrada que sólo podía abrirse desde afuera y unos orificios en la nariz y otros en los ojos. Dentro se colocaba a la víctima y debajo del toro se hacía una inmensa fogata que quemaba viva a la víctima.
El potro es otro invento bastante conocido y, en aquel tiempo, bastante utilizado, desafortunadamente. En este la víctima se tumbaba en una camilla de madera y sus extremidades eran atadas con unas cuerdas. Se triaba tan fuerte de estas cuerdas hasta dislocar romper o arrancar los brazos y piernas.
Uno que es también muy clásico es la doncella de hierro es posiblemente la máquina de tortura más popular que existió y también una de las más aterradoras. Este consistía en una especie de sarcófago de hierro en el que, al cerrar la puerta, se introducían una gran cantidad de púas punzantes clavándose, así, por todo el cuerpo. Y por si el terrible castigo de tener en tu cuerpo clavadas decenas de púas fuera poco, los biólogos de aquella época estudiaron los sitios estratégicos donde debían clavarse para que todas las victimas murieran desangradas, poco a poco y dolorosamente.
El Garrote vil fue un método que consistía en un punzón de hierro penetraba y rompía las vértebras cervicales al mismo tiempo que empujaba todo el cuello hacia delante aplastando la tráquea contra el collar fijo, matando así por asfixia o por lenta destrucción de la médula espinal. Este fue usado hasta principios del siglo XX en Cataluña y en algunos países latinoamericanos.
La gota china era un método de tortura psicológica que consistía en inmovilizar a la víctima en forma horizontal boca arriba dejándole caer cada 5 segundos sobre su frente una gota de agua fría. Este acto le provocaba daño físico en la frente pero lo que era más molesto era no poder beber agua ni dormir. La victima acababa muriendo por un paro cardíaco a causa del sufrimiento.
Mariona.
Mariona, l’article està bé, encara que no és pròpiament el tipus d’escrit que s’espera al bloc, més personal que informatiu. A més, hi ha elements massa superficials i d’altres semblen poc acabats, per exemple, quan dius “diferentes maneras de torturar a la gente para descubrir la verdad”, no se sap de quina “veritat” estàs parlant (no se n’ha parlat pas d’això abans!).
No paris!
Josep Maria